Armónica Café

Cuando empecé realmente no tenía experiencia en negocios. No había escrito ni medio plan de negocio, simplemente me deje llevar de una pasión y así ordené mi primer horno. Muchos pensaban que estaba loca, pero yo sabía que estaba haciendo lo que me gustaba y así empecé a vender postres desde mi casa a muchos amigos y familiares. Nunca paraba de leer sobre nutrición, todos los días leía más y más. No tenía claro si me iba a dedicar solo a eso. Luego de 2 meses, ya sabía que tenía un gran concepto y algo que si podía volver un negocio; aunque muchos dudaban, muchos me apoyaban y entendían lo que yo quería promover. Es más que un negocio, es un estilo de vida, es dar lo mejor y todos mis conocimientos a los que me siguen.

Les dejo 4 cosas que he aprendido a lo largo de estos tres años y me han ayudado bastante:

No tengas miedo

El miedo puede hacer que estés indeciso. Se necesita valor para abrir un negocio y es normal cometer errores. En mi caso, yo lo organice todo y me arriesgué. Creía en mi concepto y tenía una gran pasión dentro de mí. Con el tiempo he aprendido mil cosas pero nunca he perdido la fuerza. Canaliza ese miedo como combustible para motivarte.

Lleva un ritmo, todo paso a paso

No quieras hacer todo rápido y hacer el negocio más grande simplemente porque sí. Empieza pequeño, crea tu público y una buena clientela y así poco a poco puedes hacer planes más grandes. La vida en los negocios es como un maratón. Te tomará tiempo y mucho entrenamiento pero valdrá la pena.

Aunque abrí mi cafetería después de solo un año y medio en casa, estoy segura de que supe hacerlo en el momento correcto. Me sentía confiada y así empecé con poquito personal para ayudarme. Poco a poco mientras la clientela fue aumentando y fui creando un nombre, pude buscar más ayuda, decorar mi café para poder recibir mejor a mis clientes, hacer un almacén, comprar otras máquinas, refris mas grandes y así.. Eso si, nunca se deja de invertir jajaja.

Siempre se presentarán problemas

Resolver problemas es normal cuando tienes un negocio. Siempre tendrás quejas y críticas. Acepté el hecho de las malas noticias y siempre he sido demasiado positiva. Al principio no estaba nada acostumbrada a todo esto pero en los negocios (y más de alimentos) es algo de todos los días. “Se malogró la licuadora”, “Fulanita no puede venir hoy”, “Un cliente encontró un pelo en su plato”, “Se malogró la lechuga”, “Perdimos 10 kg de fresas” y así….no son problemas, pero si temitas que son normales que sucedan. Simplemente respira, resuelve y continúa tu trabajo. Tienes que aprender a tomar los problemas con calma y mantener la cabeza siempre firme.

Rodéate de gente apasionada, trabajadora y con experiencia.

Al principio, solo serás tú. Con el tiempo, tendrás que conectar con personas que te ayudarán, que entenderán tu trabajo o marca y trabajaran junto a ti.  Conecta con las personas que sabes que tienen más tiempo que tú en el mercado ya sea con otro tipo de negocio o con un negocio parecido. Estas personas podrán ayudarte y podrás hacer muchas cosas en conjunto ya sean actividades, videos promocionales o un producto. Así mismo trata de contratar personas que le guste tu marca y tengan la misma pasión que tú por formar parte de ella. Doy gracias a aquellas personas cercanas a mí que me apoyaron desde el día 1 y creyeron en mi pasión. No hay nada mejor que una colaboración entre dos y que en la unión está la fuerza.  No dejes que personas negativas entren a tu vida y siempre rodéate de gente que te haga feliz.

En fin, toma riesgos, todo llegará en su momento, ten un plan, entiende que van a surgir problemas y conecta con personas que te apoyen y aporten a tu vida. Por mi parte, seguiré trabajando en mis proyectos para brindarles más salud y bienestar por medio de la comida y los postres deliciosos de Armónica Café y Vive Saludable.