Es sencillo, si no te gustan o incomodan los puntos negros que tienes en el rostro, con esta simple pero buenísima mascarilla podrás decirles adiós. Solo necesitas:
1. Sumo de naranja: ayuda a cerrar los poros abiertos y nutre y abrillanta la piel
2. Bicarbonato de sodio: remueve las impurezas y tiene propiedades exfoliantes.
¿Los tienes? Entonces, ¡manos a la obra y a eliminar esos odiosos puntos oscuros!
Preparación:
1. Mezcla una cuchara de ambos ingredientes hasta formar una pasta ligera
2. Aplícala en las zonas deseadas del rostro, sobre todo en esas mas afectadas por los puntos negros
3. Déjala actuar y espera 15 minutos
4. Una vez pasados los 15 minutos, da suaves masajes a tu rostro en forma de círculos para exfoliar
5. Enjuaga con abundante agua (solo agua)
¡Y listo! Repite el procedimiento una vez a la semana y veras como tú piel tendrá cada vez menos puntos negros y una apariencia mucho más saludable y libre de imperfecciones.